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En este video te explico de dónde nacen las virtudes, cómo se encuentran, para qué sirven y cuáles son. “Quisiera estar siempre libre de adversidad; pero si alguna vez tengo que soportarla, me comportaré valientemente, con honor, con audacia. Por supuesto, prefiero que no ocurra la guerra; pero si ocurre la guerra, deseo soportar noblemente las heridas, el hambre y todo lo que trae la exigencia de la misma. No quiero estar enfermo, ¡no estoy loco! pero si alguna vez tengo que estar enfermo, deseo no hacer nada precipitado o deshonroso. La conclusión es: no es que las dificultades sean deseables, sino que la virtud es deseable. La virtud es la que nos permitirá soportar las dificultades con paciencia y fuerza”. Séneca, Cartas de un Estoico 67.4 (también llamadas epístolas morales) “Mira el pasado —imperio tras imperio— y, a partir de ahí, extrapola el futuro: lo mismo. No hay escapatoria del ritmo de la historia. Es por eso que observar la vida durante cuarenta años es igual de bueno que observarla por mil años. ¿De verdad verías algo nuevo?”Marco Aurelio, Meditaciones 7.49 “¿Cuánto más vas a esperar para exigir lo mejor para ti? Se te han presentado las doctrinas esenciales y pretendes comprenderlas. Entonces, ¿qué clase de maestro estás esperando? ¿Estás retrasando la puesta en práctica de estos principios hasta que él llegue? Ya eres una persona adulta, ya no eres un niño. Si sigues siendo descuidado y perezoso, poniendo excusa tras excusa, fijando un día tras otro en el que finalmente tomarás las riendas, tu falta de progreso pasará desapercibida, y al final habrás vivido y muerto sin propósito”. Epicteto, Enquiridión 51