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Al final de la Segunda Guerra Mundial, mientras el Tercer Reich se desmoronaba, millones de civiles alemanes se vieron atrapados en una ola de violencia, expulsiones y represalias que marcaron uno de los capítulos más oscuros del conflicto. Con la llegada del Ejército Rojo al este y la venganza de pueblos ocupados durante años, muchos alemanes —especialmente mujeres, niños y ancianos— sufrieron masacres, violaciones, torturas y expulsiones forzadas. Lo que había comenzado como una liberación terminó convirtiéndose, en varios casos, en una campaña de castigo masivo. Las regiones más afectadas fueron Prusia Oriental, Silesia, Pomerania y los Sudetes, donde millones de alemanes étnicos fueron considerados enemigos por el simple hecho de su origen. La política de “expulsión de alemanes” aprobada por los Aliados en Potsdam resultó en el desplazamiento forzoso de más de 12 millones de personas. Muchos murieron en el camino debido al frío, el hambre, la violencia o simplemente el agotamiento. Se estima que entre 500.000 y 2 millones de civiles alemanes murieron durante estas expulsiones, aunque las cifras exactas aún generan debate entre historiadores. Particularmente brutal fue la violencia sexual cometida por soldados soviéticos en Berlín y otras ciudades del este. Decenas de miles de mujeres fueron violadas sistemáticamente, muchas veces frente a sus familias. Estos actos no fueron casos aislados, sino una expresión de odio acumulado tras años de ocupación nazi. Además, en países como Checoslovaquia y Polonia, se organizaron pogromos, campos de internamiento y ejecuciones sumarias contra poblaciones germanoparlantes que vivían allí desde hacía siglos. Aunque durante años este tema fue silenciado o minimizado, hoy muchos historiadores lo reconocen como una tragedia humanitaria que no puede ser ignorada. El sufrimiento del pueblo alemán al final de la guerra no justifica los crímenes del nazismo, pero tampoco debe ser borrado de la memoria. Comprender ese dolor —y las decisiones políticas que lo permitieron— es esencial para tener una visión completa de lo que significó realmente el colapso de la Europa de Hitler. Porque toda guerra, incluso cuando termina, sigue dejando víctimas. Preguntar a ChatGPT