Mayte Montenegro -- Canción para una esposa triste (1,972) скачать в хорошем качестве

Mayte Montenegro -- Canción para una esposa triste (1,972)

Maitén Montenegro es una de las artistas chilenas más versátiles del mundo del espectáculo local. Inició su carrera muy joven, a los 16 años, en plena época de la nueva ola. Su interés por la música la motivó a ser reconocida en los años sesenta como una gran baterista. Se hizo conocida en el TV cuando hizo el programa "Maijope Show", nombre que integraba las sílabas de sus compañeros de grupo: Maitén, Jorge Rebel y Pepe Gallinato. "Canción para una esposa triste", es uno de los pocos discos que grabó Maitén en su carrera. Acompañada del director de orquesta Horacio Saavedra, interpreta esta canción, que en su época fue todo un éxito. LETRA: Los niños ya se fueron a dormir, Quiero que hablemos. No trates de evitar la situación como otras veces. Si crees que no sé qué pasa en ti, no me conoces Recuerda que una vez me amaste igual Como hoy la amas. No intentes inventar explicación, no es necesario. Ni es culpa tuya si tu corazón Ya no me quiere. No voy a hacer un drama ni a llorar De qué valdría. Te amo, pero no puedo evitar esta partida. Llegó el momento del adiós, Ya no hay más nada que agregar. No tengas pena si te vas, la vida tiene que seguir. No te despidas al partir Los niños pueden despertar Si preguntaran dónde vas Tú no sabrías qué decir. Las flores del jardín se morirán y habrá otras nuevas La calma que precede al temporal Es más sincera. Sin ti los niños crecerán igual, yo tendré canas Y el mundo que queremos detener Vuelve a girar. Antes de entrar en tu pasado quiero darte las gracias Por lo felices que fuimos hasta hace poco. Gracias por nuestros hijos. ¿Cómo es ella? es linda, es buena, te quiere mucho No, no digas nada, es mejor así y duele menos. Cuídate, abrígate al salir porque hace frío. Y ahora vete, vete porque la piedad puede más Que la soledad. Llegó el momento del adiós No tengo nada que agregar No tengas pena si te vas La vida tiene que seguir. No te despidas al partir Los niños pueden despertar ...