Himno Imperial del Imperio Alemán: "Heil dir im Siegerkranz" [4K] скачать в хорошем качестве

Himno Imperial del Imperio Alemán: "Heil dir im Siegerkranz" [4K]

⟪Himno⟫ "Heil dir im Siegerkranz" en español "Viva tu corona victoriosa" o "Salve tu corona victoriosa" fue el himno real del Reino de Prusia (1701-1918) de 1795 a 1918 y uno de los tres himnos no oficiales, este fue considerado como un himno imperial del Imperio Alemán (1871-1918) de 1871 a 1918. Se entonaba en ocasiones patrióticas relacionadas con el emperador, como jubileos del trono y aniversarios de nacimiento y muerte, así como días festivos. La letra fue escrita por Heinrich Harries en 1790 en honor al rey Cristián VII de Dinamarca. El texto original fue adaptado después por Balthasar Gerhard Schumacher en 1793 para su uso en el Reino de Prusia, posteriormente fue usado en el Imperio alemán. ⟪Historia⟫ El 10 de diciembre de 1870, el Reichstag de la Confederación Alemana del Norte renombró a la Confederación como "Imperio Alemán" y dio el título de emperador alemán a Guillermo I, el rey de Prusia, como Bundespräsidium de la Confederación. La nueva constitución (Constitución de la Confederación Alemana) y el título de emperador entraron en vigor el 1 de enero de 1871. Durante el Sitio de París el 18 de enero de 1871, Guillermo aceptó ser proclamado emperador en el Salón de los Espejos del Palacio de Versalles. La Proclamación del Imperio alemán (en alemán, Deutsche Reichsgründung) tuvo lugar el 18 de enero de 1871, después de la victoria conjunta de los estados alemanes en la Guerra franco-prusiana. La creación del Imperio bajo el liderazgo prusiano fue una victoria para el concepto de Kleindeutschland (Alemania más pequeña) sobre el concepto de Großdeutschland. Esto significaba que Austria-Hungría, un imperio multiétnico con una considerable población de habla alemana, permanecería fuera del estado-nación alemán. La política de Bismarck era buscar una solución diplomática. La alianza efectiva entre Alemania y Austria jugó un papel importante en la decisión de Alemania de entrar en la Primera Guerra Mundial en 1914. Bismarck anunció que no habría más adiciones territoriales a Alemania en Europa, y su diplomacia después de 1871 se centró en estabilizar el sistema europeo y prevenir cualquier guerra. Tuvo éxito, y solo después de su salida del cargo en 1890 las tensiones diplomáticas comenzaron a aumentar nuevamente. El 9 de marzo de 1888, Guillermo I murió poco antes de cumplir 91 años, dejando a su hijo Federico III como el nuevo emperador. Federico era un liberal y un admirador de la constitución británica, mientras que sus vínculos con Gran Bretaña se fortalecieron aún más con su matrimonio con la princesa Victoria, hija mayor de la reina Victoria. Con su ascenso al trono, muchos esperaban que el reinado de Federico condujera a una liberalización del Reich y un aumento de la influencia del parlamento en el proceso político. La destitución de Robert von Puttkamer, el muy conservador ministro del Interior prusiano, el 8 de junio fue una señal de la dirección esperada y un golpe a la administración de Bismarck. En el momento de su ascensión, sin embargo, Federico había desarrollado cáncer de laringe incurable, que había sido diagnosticado en 1887. Murió el día 99 de su gobierno, el 15 de junio de 1888. Su hijo Guillermo II se convirtió en emperador. En 1914 tras el asesinato del archiduque austrohúngaro Francisco Fernando por Gavrilo Princip, el Kaiser ofreció al emperador Francisco José pleno apoyo a los planes austrohúngaros de invadir el Reino de Serbia, al que Austria-Hungría culpó por el asesinato. Muchos alemanes querían el fin de la guerra y un número creciente comenzó a asociarse con la izquierda política, como el Partido Socialdemócrata y el más radical Partido Socialdemócrata Independiente, que exigió el fin de la guerra. La entrada de Estados Unidos en la guerra en abril de 1917 inclinó aún más el equilibrio de poder a largo plazo a favor de los Aliados. A finales de octubre de 1918, en Kiel, en el norte de Alemania, comenzó la Revolución alemana de 1918-1919. Las unidades de la Armada alemana se negaron a zarpar para una última operación a gran escala en una guerra que vieron como perdida, iniciando el levantamiento. El 3 de noviembre, la revuelta se extendió a otras ciudades y estados del país, en muchos de los cuales se establecieron consejos de trabajadores y soldados. Mientras tanto, Hindenburg y los generales de alto rango perdieron la confianza en el Kaiser y su gobierno. El 9 de noviembre, el socialdemócrata Philipp Scheidemann proclamó una república. El nuevo gobierno dirigido por los socialdemócratas alemanes pidió y recibió un armisticio el 11 de noviembre. Fue sucedido por la República de Weimar. Los que se oponían, incluidos los veteranos descontentos, se unieron a un conjunto diverso de grupos políticos paramilitares y clandestinos como los Freikorps, el Cónsul de la Organización y los comunistas.