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JUAN ARVIZU - VEREDA TROPICAL

JUAN ARVIZU CANTA "VEREDA TROPICAL" CON ACOMPAÑAMIENTO DE MARIMBA; POSIBLEMENTE SEA LA PANAMERICAN Ö LA "ALMA SALVADOREÑA" CON LA QUE GRABARA UNA SEGUNDA VERSIÓN EN BUENOS AIRES - ARGENTINA. Vereda tropical. Es una de las canciones más significativas de la época de oro de la canción mexicana y se ha grabado también en inglés, francés, alemán e italiano por los más grandes intérpretes de la música mundial; desde Juan Arvizu (en su versión más lograda), hasta Plácido Domingo, Toña La Negra, Los Panchos, Lupita Palomera en versiones exquisitas —por citar algunos—. Si bien siempre se consideró que la pieza musical fue escrita por el genial músico Gonzalo Curiel en Acapulco en 1936 y estrenada en 1938 en la película mexicana “Hombres de Mar”, el poema original refiere a una senda o camino que llevaba el nombre de Vereda Tropical, el que unía a la capital de El Salvador, San Salvador con Santa Tecla. Este sendero era recorrido por Ricardo Cabrera a sus veinteañeros años cuando regresaba del Liceo Militar a su casa natal en esta ciudad de Santa Tecla, en el departamento La Libertad y cuyas playas fueron el marco final para la composición del poema. Destaquemos también que el cantante Jorge Negrete canta una canción del genial compositor salvadoreño Pancho Lara, "Sobre La Playa", la interpretación de Jorge Negrete es acompañada por la Orquesta Marimba Panamericana (grabación de 1937-1938 en New York), describiendo las Playas de El Salvador refiriéndose a las de La Libertad, no dejando duda que estas eran el marco romántico de la época: Orgía de Luna sobre la playa fiesta de rumores y de perfumes, bacanal de risas que se eternizan sobre las tersas y lindas playas de Cuzcatlán. Siendo muy joven Ricardo Cabrera conoce a Juan Arvizu (con quien entablará una importante amistad musical, tanto en México como posteriormente en Argentina). Fue en la emisora XEW donde el “Tenor de la Voz de Seda” Juan Arvizu le presenta al maestro José Pierson el poema del vate salvadoreño; el maestro Pierson, quien impulsaría la carrera de Juan Arvizu, como la de otros cantantes de la época, le enseña a Gonzalo Curiel la letra de Vereda Tropical y este compone la música que la hará inmortal. En aquel entonces la música popular y romántica se abría campo en los escenarios más importantes de las ciudades de Sudamérica: Ciudad de México, Buenos Aires, Río de Janeiro. Artistas tales como Margarita Cueto, Pedro Vargas, Juan Pulido, Carlos Mejía, José Mojica, entre otros, incursionaron en el mundo de la música popular con gran éxito. Juan Arvizu no fue la excepción, prensando su voz con el sello discográfico Brunswick en 1928, por lo que aún se discute si fue Juan Arvizu o Pedro Vargas quien grabara la canción de Ricardo Cabrera, y cuya autoría solo quedara para Gonzalo Curiel, cuando esta fue registrada en Ciudad de México sin la presencia del poeta salvadoreño. Resultando la canción con la que obtuvo mayor reconocimiento Curiel por la gran popularidad alcanzada. Cuenta Lupita Palomera “La Novia de la Canción”, primera intérprete de Vereda Tropical y que la interpretara en la película “Hombres de Mar, “que esta canción de autor centroamericano y con música de Gonzalo Ciruel, llegó a ser tan popular como bolero en México en aquellos años que, en los anuncios de los diarios solicitando servicio doméstico, se veían algunos que decían así: “Se solicita empleada doméstica que NO cante Vereda Tropical”. Pero este relato quedará como anécdota en el arcano del tiempo ya que aún no se han conseguido los registros en El Salvador o en México que respalden esta hermosa historia, pero lo cierto que Vereda Tropical refiere al sendero entre San Salvador y Santa Tecla —como hemos citado— Pero la fama de Juan Arvizu ya había traspasado fronteras. En 1935, el cantante realizó su primera gira internacional. En Buenos Aires inauguró la emisora “Radio El Mundo”. Pero su estadía en Argentina que estaba programada solamente por dos meses se extendió por año y medio. Fue una temporada triunfal para Juan Arvizu. Esta gesta se repetiría luego cuando terminó su contrato en Nueva York con la “RCA Victor” y nuevamente junto a Ricardo Cabrera ya en Buenos Aires graba el corrido “El Morral Es Mi Ranchito” y el bolero “Dirán Que Es Amor” del vate salvadoreño en 1944. El público se volcaba a los escenarios y confiterías, como La Ideal o la Confitería Cabildo donde Arvizu actuaba junto a Ricardo Cabrera con la Orquesta de René Cóspito.