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Osnis, Anfibios de Sirius y los hombres pez en la historia de la humanidad.

Los hombres pez también quedaron registrados en los escritos y leyendas antiguas, que los definían como un ser mitad humano y mitad pez, con un hablar y expresión similar a la humana, y que fueron creados por otros seres que llegaron primeros a la tierra. Los cuentos y leyendas de sirenas del mar y tritones se remontan a la antigüedad y hacen parte del folclore de casi todos los países del mundo. A lo largo de los siglos, los hombres-pez han sido vistos por testigos de reconocida integridad, y siguen viéndose en la actualidad. Miles de embarcaciones relatan la presencia de enormes objetos entrando y saliendo del mar ya sea en el día o hacia altas horas de la noche, también avistamientos de extrañas luces debajo del agua que fueron detectados por nuestros modernos radares, surcando a velocidades increíbles, se presume que en nuestros océanos habitan civilizaciones mucho más adelantadas que el hombre moderno. Los testimonios de supuestos contactados que aseguraron ser llevados por gente de las estrellas a sus bases marinas y que dicha humanidad acuática monitorea nuestra civilización. Tenemos registro de otros encuentros no tan amistosos entre hombres y seres humanoides anfibios que tienen una tendencia de evitar a la gente de superficie. Las historia s relativas al dios pez Oannes presentan un curioso parecido con las de Viracocha y Kon-Tiki. Tienen en común que ambos eran barbudos y ambos surgieron del mar. Prohibieron los sacrificios humanos. Ambos fueron civilizadores. Cronológicamente, la primera de estas entidades anfibias parece ser la gente de los peces de Babilonia. A los babilonios les conocían como los Annedoti , que se traducen como "repulsivos", pero a pesar de su aspecto poco atractivo, eran lo suficientemente influyentes para que los babilonios aceptaran sus enseñanzas y adquirieran de ellos los principios fundamentales de la civilización