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La germinación de semillas de cannabis es un paso importante en el proceso de cultivo de plantas de cannabis. Estos son los pasos que puedes seguir para germinar semillas de cannabis: Remoje las semillas: coloque sus semillas de cannabis en un vaso de agua destilada y déjelas en remojo durante unas 12 horas. Esto ayudará a suavizar la cubierta de la semilla y facilitará que la semilla germine. Prepara un medio de cultivo: puedes usar varios medios de cultivo diferentes para germinar tus semillas de cannabis, como tierra, lana de roca o gránulos de turba. Si usa tierra, asegúrese de que sea una mezcla ligera y aireada que no se compacte demasiado. Planta las semillas: una vez que las semillas se hayan empapado, plántalas aproximadamente a 1/2 pulgada de profundidad en el medio de cultivo. Cubra las semillas con una capa ligera de tierra u otro medio de cultivo y asegúrese de que se mantengan húmedas. Proporcione las condiciones adecuadas: las semillas de cannabis necesitan un ambiente cálido y húmedo para germinar. Idealmente, la temperatura debe estar entre 21 y 27 °C (70 y 80 °F) y la humedad debe rondar el 70 %. Puede lograr estas condiciones usando una estera térmica para plántulas y una cúpula de humedad. Espera a que broten las semillas: las semillas de cannabis pueden tardar desde unos pocos días hasta una semana en brotar. Una vez que lo hagan, asegúrese de que tengan suficiente luz (ya sea natural o artificial) y continúe manteniendo húmedo el medio de cultivo. Transplante las plántulas: una vez que sus plántulas tengan algunos juegos de hojas verdaderas, se pueden trasplantar a recipientes más grandes o al suelo si está cultivando al aire libre. Recuerda, las semillas de cannabis son delicadas y pueden dañarse fácilmente. Manéjelos con cuidado y sea paciente durante el proceso de germinación. ¡Buena suerte!