"Yo Mando en esta Ciudad”, dijo el Jefe de Policía Corrupto al Juez - y salió Esposado del Tribunal. скачать в хорошем качестве

"Yo Mando en esta Ciudad”, dijo el Jefe de Policía Corrupto al Juez - y salió Esposado del Tribunal.

La sala del tribunal se llenó de un silencio sepulcral cuando el Jefe de Policía Marcus Sullivan cruzó las puertas de madera maciza con una arrogancia que helaba la sangre. Sus zapatos de cuero italiano resonaban contra el piso de mármol como martillos golpeando un yunque. Llevaba su uniforme impecable, con medallas brillando bajo las luces fluorescentes, como si cada una de ellas fuera un escudo contra la justicia que estaba por caer sobre él. Sus ojos, fríos como el acero, recorrieron la sala con desprecio. No mostraba ni una pizca de preocupación. Para él, este era solo otro día en el que su poder lo protegería de las consecuencias. Pero lo que no sabía era que frente a él estaba sentado un hombre que no se doblegaba ante nadie: el legendario Juez Frank Caprio, conocido en todo Estados Unidos por su integridad inquebrantable y su compasión equilibrada con justicia férrea.