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En mi cumpleaños, la llamada que hice a Elias fue contestada por su secretaria. La voz de la joven sonaba entrecortada, jadeante, cargada de un placer evidente. “El señor Thorne está… ocupado.” Si tienes algo que decir, dímelo a mí. Yo estaba sola, de pie en el largo y oscuro pasillo del hotel, mirando el número de habitación frente a mí. Respondí con calma: “Estoy justo afuera de tu puerta, ábrela.” Aunque ya estaba preparada, la escena que vi al abrirse la puerta me hizo tambalear y casi perder el equilibrio. Ropa, ropa tirada por todo el suelo, la ropa interior de encaje de una mujer enredada con el cinturón de cuero de un hombre, botones esparcidos por todas partes. Elias estaba recostado contra el cabecero, su camisa, manchada de lápiz labial, abierta de par en par, revelando sus abdominales firmes y bien definidos. Se veía refinado, pero también como un completo sinvergüenza. La secretaria a su lado se escondía bajo las sábanas, los ojos llenos de lágrimas, temblando. Al ver mi expresión sombría, la sonrisa en los labios de Elias se hizo más triunfante. Me preguntó con provocación: “Aria, ¿no me estabas dando la espalda por el trabajo? Ya te dije, si no quieres ser la esposa del presidente, hay muchas chicas más jóvenes y más bonitas que sí quieren.” Dicho esto, Elias colocó triunfante su mano sobre el hombro terso y pálido de la secretaria, mirándome con desafío. Elias y yo llevábamos medio mes evitándonos. No le gustaba mi trabajo de periodista, decía que me exponía demasiado al público y quería que lo dejara para ser ama de casa a tiempo completo. Yo me negué. Nunca esperé que usara este método para amenazarme. Él pensaba que yo cedería. Tras un momento de silencio, me agaché, tomé con dos dedos un rincón de la camisa y se la arrojé a la secretaria. “No estoy aquí para atraparte en una infidelidad, es solo que tu aventura es tan descarada que hay varios paparazzi esperando afuera del hotel para un escándalo.” Hice una pausa y continué: “Pero ya los soborné y les dije que tú y tu secretaria vinieron al hotel para prepararme una sorpresa de cumpleaños.