Me MINTIÓ Diciendo que Estaba Ocupado Cuando Estaba con su AMANTE y los Descubrí con... скачать в хорошем качестве

Me MINTIÓ Diciendo que Estaba Ocupado Cuando Estaba con su AMANTE y los Descubrí con...

En mi cumpleaños, recibí un regalo anónimo: un video. En el video, mi esposo, Daniel, tenía el brazo alrededor de una chica, sonriendo mientras la presentaba a los demás. "Ella es Emily, mi novia", dijo. Pausé el video y observé detenidamente a los dos. Daniel aún llevaba el traje que le había elegido esa misma mañana, junto con la corbata azul que más me gustaba. Se veía elegante, digno. De pie a su lado, había una chica que no reconocía. Tenía ese tipo de rostro que hace recordar al primer amor idealizado de la juventud, dulce, inocente, con el cabello negro largo cayendo sobre sus hombros, y un vestido blanco simple. Sus labios estaban curvados en una suave sonrisa, mientras permanecía en silencio, con la apariencia de una narcisista en flor. Estaba acurrucada entre sus brazos, su expresión era tímida, pero aceptaba tranquilamente las felicitaciones de todos. Era deslumbrante, tan deslumbrante que solo pude suspirar. Pero el Daniel del video también me parecía un extraño. Jamás me había involucrado en la vida social de Daniel. Durante los siete años de nuestro matrimonio, siempre nos habíamos cuidado y respetado. Existía entre nosotros una comprensión profunda, no dicha, algo que no hacía falta expresar con palabras. Pero ahora, esa misma comprensión se había convertido en la libertad que él utilizaba para entregarse abiertamente. En el video, el anillo de bodas de Daniel había desaparecido. En su lugar, llevaba un pequeño gemelo en forma de sandía, prendido en su manga. El rojo brillante destacaba contra su traje oscuro. Quizá fue solo el instinto de una mujer, pero estaba casi segura de que ese gemelo le pertenecía a esa chica. Su diseño caricaturesco contrastaba por completo con el estilo habitual de Daniel, y sin embargo, él lo llevaba con orgullo, como si ella hubiera traído vida y color a su existencia, antes monótona. Parecía un joven otra vez, con los ojos brillantes, sujetándola con fuerza, declarando su propiedad con una sonrisa autosatisfecha, su risa era libre, desenfrenada.